Desfilás prendas para el momento:
una infinita prueba de camisas
con su correspondiente transporte
de peines y pañuelos
¿Es eso acaso todo esto?
¿Es eso acaso todo?
Rozas, en tus desfilar,
los bordes de las cosas
la orilla en que se disponen
a tu límite,
las acaricias como incorporándolas
mudas lentas blandas.
Sos tu casa móvil
y te vas amueblando
sobre la marcha
caprichoso
en plena vigilancia nocturna
por la palabra que encandila
y que al acercarse, pierde
la fuerza que nacía de su
brillar tenue en un rincón
entre las cañas de cuando
esto,
así,
hasta la esquina
era todo baldío.